Dar apoyo integral al niño enfermo y a su núcleo familiar mientras dura la terapia.
Aportar a los niños con cáncer los medicamentos, materiales clínicos, exámenes y otros beneficios que no son financiados por el MINSAL.
Mantener la escolaridad del niño durante el tratamiento.
Realizar actividades recreativas para mejorar la calidad de vida de los pacientes.